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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáHace días envié una carta sobre las graves irregularidades que compruebo en la Cooperativa Municipal. No me voy a extender en ello, ya que fue explicitado en mi anterior carta. Pero sí quiero hacer público que solicité a la Cooperativa Municipal que me enviara la constancia de la renuncia a mi calidad de socia que hice oportunamente y que, contrariando la ley, pretendían que tuviera una “reunión” con los interventores (nunca se me dijo ni siquiera sus nombres) para que manifestara cuál era “mi disgusto” por el que quería renunciar.
Eso es abusivo, ya que como dice la ley la renuncia es voluntaria y jamás la usé. Las explicaciones me las tienen que dar las autoridades interventoras de por qué se niegan a cumplir con la ley .
Solicité la devolución del importe de las acciones que me corresponden y la constancia de que ya no soy socia de dicha cooperativa pero se niegan a hacerlo. Envié cartas a la Auditoría Interna de la Nación y recibí como respuesta que me dirigiera a Defensa del Consumidor.
La potestad no es de esta última sino de la Auditoria Interna de la Nación, dependiente del Ministerio de Economía y Finanzas, como marca la ley. Les respondí eso y como respuesta me dicen que la Cooperativa Municipal manifiesta que me comunique con ellos y me dan una dirección de correo que es la misma a la que he escrito varias veces con el resultado antes dicho. Solicito que las autoridades tomen medidas en este asunto porque la cooperativa me mantiene de rehén de ellos (y ni siquiera sé quiénes son ellos).
Renuncié a dicha cooperativa y tengo todo el derecho, en primer lugar, de que hagan llegar la constancia correspondiente de que no soy más socia firmada por los interventores. Y, por cierto, de la devolución del monto de mis acciones.
Diva E. Puig