Canchas en mal estado, tribunas vacías, estadios sin luces y partidos largos, friccionados, cortados por los árbitros y con pocas chances de gol. Los elementos del campeonato local se repiten y la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) busca insertar cambios para mejorar un fútbol uruguayo que en pocos meses necesita vender sus derechos de televisación.
Parte de las soluciones fueron encargadas a EY-Parthenon, una consultora global de estrategia que forma parte de la multinacional británica Ernst & Young, con el objetivo de “fortalecer el diseño y la estructura de los torneos locales para capturar más valor y fortalecer la experiencia del consumidor”, según señalan algunos de los resultados finales a los que accedió Búsqueda.
El reporte se enfocó, entre otras cosas, en buscar medidas para aumentar el tiempo de juego y disminuir el tiempo muerto de los partidos, una de las principales preocupaciones de la AUF, que pretende discutir el tema con la Asociación Uruguaya de Árbitros de Fútbol para habilitar un juego más fluido, donde solo se sancionen faltas de contacto claro, como sucede por ejemplo en la Premier League de Inglaterra. De acuerdo con EY-Parthenon, los minutos de juego en el fútbol uruguayo también pueden crecer con un uso más rápido del sistema de asistencia arbitral por video (VAR, por sus siglas en inglés).
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El VAR centralizado concentra la revisión de jugadas en una única sede y no en cada estadio
Guillermo Legaria/GAMBA/adhocFOTOS
Como en el resto del mundo, en Uruguay el VAR funciona liderado por un árbitro asistente que complementa a sus cuatro colegas en cancha desde un centro de monitoreo con acceso a las imágenes del partido. Interviene para ayudar al equipo en cancha en caso de un “error claro y obvio” —o potencial error claro y obvio— o de un “incidente grave inadvertido” en relación con goles, decisiones de penales, incidentes de tarjeta roja y confusión de identidad del futbolista. En 2019 se utilizó por primera vez en el país; en 2020 se empleó en tres partidos por fecha y a partir de 2022 el sistema cubre todos los encuentros de Primera División.
A diferencia de otras ligas, sin embargo, el VAR trabaja desde una cabina móvil ubicada en los estadios, por lo cual se le recomendó a la AUF que construya un centro fijo como sucede en Argentina —donde el sistema está instalado en el complejo de Ezeiza de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA)— y en las competiciones internacionales organizadas por la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), que tiene su sala de operaciones en su sede de Luque, Paraguay.
El VAR centralizado ofrece un entorno más seguro para los árbitros y más controlado técnicamente. Proporciona el mismo nivel de equipamiento e infraestructura para todos los partidos, lo cual permite una calidad constante en las transmisiones y un manejo más riguroso del proceso y las revisiones de las jugadas, a la vez que minimiza errores derivados de un mal montaje o de interferencias en la señal.
De todas formas, la construcción de un centro VAR enfrenta en Uruguay una limitación económica y la AUF está indecisa tanto sobre la inversión como por la ubicación. La sede actual de la asociación, ubicada en la calle Guayabos, presenta problemas de adecuación arquitectónica para un sistema de videoarbitraje. Además, existe interés en la AUF de trasladar todas sus oficinas al Estadio Centenario con miras al Mundial 2030.
De la Mesa Ejecutiva a la inteligencia artificial
Las conclusiones de la consultoría encargada por EY-Parthenon serán presentadas en las próximas semanas por la AUF. “El informe tiene una cantidad de sugerencias de cómo organizar la liga hacia el futuro, para que las nuevas generaciones, el nuevo tipo de audiencia, los jóvenes sigan atendiendo al fútbol, sigan enganchados con el fútbol y sigan entreteniéndose con el fútbol”, dijo Ignacio Alonso, el presidente de la asociación. Entrevistado por el programa La quinta tribuna, de AUFTV, Alonso insistió con que el fútbol uruguayo está un paso atrás de las tendencias globales del deporte y necesita “mucho profesionalismo” para actualizarse.
“El informe habla de todo eso: de que ya las nuevas generaciones no van a querer ver una cancha sin pasto, ni un estadio donde crecen los yuyos, ni un estadio sin buen ploteo de publicidad o sin una buena cobertura de público, ni un espectáculo transmitido a dos o tres cámaras con gotas de lluvia en los lentes de las cámaras, ni van a admitir tener canchas sin iluminación. El nuevo consumidor está buscando calidad”, afirmó.
Además del VAR, el reporte que recibió la AUF propone emplear la inteligencia artificial (IA) para paliar una dificultad histórica del fútbol uruguayo: la logística de sus torneos. Estadios inhabilitados, otros que se habilitan a último momento con arreglos paliativos, equipos que cambian sus localías por dinero, fechas enteras suspendidas continuamente por todo tipo de causas y partidos postergados que terminan jugándose en horarios insólitos causan una desorganización por momentos amateur que no se encuentra en otras ligas internacionales, ni siquiera de la región: el pasado fin de semana, por la quinta fecha del Torneo Apertura, Cerro recibió a Juventud de Las Piedras en el Estadio Tróccoli y las líneas de la cancha se pintaron recién —y mal— minutos antes del partido, con los equipos haciendo la entrada en calor.
La intención de la AUF es que la IA pueda mejorar un poco este complejo panorama. En España, La Liga utiliza tecnología con IA para programar los partidos de Primera y Segunda División. Se apoya en plataformas de empresas privadas para optimizar los horarios de cada fecha con base en numerosas variables: disponibilidad de estadios, calendario futuro de los equipos, confluencia con otros eventos, husos horarios, condiciones meteorológicas y de iluminación natural, estado del tráfico, feriados, demanda de entradas, promedio de audiencias de los equipos, interés de audiencias internacionales y preferencias de los patrocinadores. Se trata de una situación bastante distante de Uruguay, donde la gestión del calendario está en manos de la Mesa Ejecutiva —un órgano interno de la AUF— y donde en ocasiones la cancha en la que se va a disputar un partido se define apenas horas antes del evento.
Otras sugerencias de la consultoría recibida por la AUF apuntan directamente al formato de las competiciones, que en la Primera División de Uruguay consiste en dos torneos cortos por temporada —Apertura y Clausura— y un torneo de mitad de año, necesario para cumplir con una cantidad mínima de partidos por temporada, aunque aun así la cantidad de partidos es insuficiente en comparación a las ligas de Europa.
Por un lado, la AUF evalúa la posibilidad de instaurar en su campeonato de mitad de año una competición inspirada en el formato de la NBA Cup. Este torneo fue introducido en 2023 por la NBA (National Basketball Association) de Estados Unidos: es un torneo paralelo e independiente al tradicional campeonato anual de la NBA, pero lo disputan los mismos equipos aprovechando los partidos habituales de la temporada regular, que busca imitar formatos de fútbol de fase de grupos y playoffs e impulsar el interés comercial y de audiencia en el momento de menor atracción en la temporada de la NBA, que es al inicio. Hasta la fecha se realizaron dos ediciones de la NBA Cup y se consiguió un patrocinio estratégico de Emirates, la aerolínea de Emiratos Árabes Unidos, para darle nombre a la competición.
Algunas de sus particularidades pueden introducirse para el Torneo Intermedio del fútbol uruguayo, que se disputa a mitad de año entre el Apertura y el Clausura y que de por sí ya tiene ciertas definiciones de la NBA Cup, como la división de equipos en grupos y el juego de una sola final para determinar el campeón.
El otro cambio que analiza la AUF es la reintroducción de finales entre equipos de Primera y Segunda División para determinar los ascensos y los descensos. Actualmente, tres instituciones descienden a la Segunda División al final de la temporada, según una tabla de promedios de puntos acumulados a lo largo del año. Quienes ascienden a Primera División son el campeón y el subcampeón de la temporada, con un tercer ascenso a definir a través de semifinales y final de ida y vuelta entre los equipos que se ubicaron del tercer al sexto lugar en la tabla de posiciones. La intención es modificar el sistema para volver a incorporar finales por el ascenso, o al menos una entre el antepenúltimo de Primera División y el tercero de Segunda División.
La regla que hizo enojar a Lionel Messi
Más allá de las sugerencias de Ernst & Young, la AUF pretende hacer más atractivo un fútbol local de muchas faltas y poco juego: en 2024 se jugó en Uruguay un promedio de 46 minutos (m) 16 segundos (s) por partido, mientras que el tiempo sin juego o muerto fue de 52 m 4 s, un promedio por debajo incluso de campeonatos como los de Chile (55 m 19 s), Ecuador (51 m 58 s) y Bolivia (49 m 30 s) y Perú (49 m 25 s). Además del VAR centralizado y la coordinación de nuevas directrices de arbitraje con los jueces, se discutirá con los clubes aplicar un nuevo reglamento para evitar que los futbolistas hagan tiempo. La propuesta es aplicada en la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos, que en 2022 detectó que el partido promedio de la liga presentaba más de cinco interrupciones de más de 15 segundos relacionadas con lesiones, aunque luego solo el 8% de esas interrupciones resultaban en la sustitución del futbolista supuestamente lesionado.
La MLS reunió a árbitros, propietarios de los clubes y médicos en un “comité de innovación” y en mayo de 2024 comenzó a utilizar dos normas nuevas: si un jugador permanece en el suelo durante más de 15 segundos y el personal médico entra a la cancha, el jugador tendrá que quedarse fuera del campo de juego durante dos minutos antes de que el juez le permita el reingreso; y un futbolista debe abandonar la cancha en 10 segundos cuando es sustituido o de lo contrario su reemplazo deberá esperar 60 segundos para ingresar. Las reglas ya se aplicaron de manera piloto en 2022 y 2023 en la liga reserva de la MLS y, de acuerdo con los primeros datos, las interrupciones de más de 15 segundos relacionadas con lesiones bajaron de seis a 1,22.
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Este cambio representa una medida pionera aún no replicada en ligas de fútbol más tradicionales. En la AUF existe incertidumbre sobre cómo será recibido en un fútbol en el que el tiempo perdido forma en ocasiones parte de la estrategia de juego de los equipos y de la “picardía” de los futbolistas. En la MLS la medida generó controversia, especialmente por la reacción de figuras como Lionel Messi, delantero del Inter Miami CF. En un partido contra el CF Montréal, Messi fue atendido por los médicos tras una infracción y debió abandonar el campo de forma momentánea. Como no estaba lo suficientemente lesionado como para ser sustituido, debió esperar dos minutos fuera del terreno antes de poder regresar, lo que desató sus críticas a la normativa.
Título papel: VAR centralizado, formato NBA y sanciones por hacer tiempo: los cambios que estudia la AUF con una consultora internacional
