Cargando miedos y penas / Armamos este camino / Que a todas nos pertenece / Nadie quedó en el olvido
El sello Bizarro produjo la grabación de Mujeres de todas partes, canción creada por Estela Magnone que se estrenó por el Día Internacional de la Mujer
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáUn We Are the World femenino. Así se presenta Mujeres de todas partes, una canción producida por el sello musical Bizarro que reúne la labor de más de 40 músicas uruguayas, y que será publicada este jueves 6 en conmemoración del Día Internacional de la Mujer. La pieza musical, que dura algo más de cuatro minutos, y el videoclip están disponibles en YouTube y Spotify desde este jueves.
La canción fue escrita y compuesta por Estela Magnone, una de las principales cantautoras de la música uruguaya, con una enorme trayectoria que incluye los grupos Travesía, Las Tres, Seda, Níquel, discos conjuntos con Jaime Roos y Eduardo Mateo, cuatro discos como solista y tres más al frente del proyecto de música inclusiva Villazul. Magnone es reconocida por sus colegas por su capacidad de abrir puertas a artistas jóvenes en sus primeros pasos. Así lo ha mencionado en varias ocasiones la rochense Florencia Núñez, por citar una figura destacada del panorama local.
Mujeres de todas partes reúne el trabajo de más de 40 cantantes, instrumentistas, productoras, realizadoras audiovisuales y diseñadoras uruguayas. Las artistas convocadas representan varias generaciones y un amplio espectro de estilos. La idea del proyecto y su producción ejecutiva corresponde a Amalia Rossi y Ximena Viña, dos experimentadas gestoras fonográficas que trabajan en Bizarro desde hace más de una década. Según manifiesta el sello, la canción “relata la lucha que codo a codo han tenido que atravesar las mujeres a lo largo de la historia para ser respetadas y valoradas, en múltiples espacios que les han sido vedados solo por su género, y augura la esperanza de nuevas conquistas”.
Para la producción artística de la grabación, Bizarro eligió a Lucía Severino, cantautora con cuatro discos y una decena de simples publicados. Dadas las dimensiones de la producción, el proceso insumió cuatro meses de trabajo. Magnone escribió la letra y compuso la música en la primavera. Entre noviembre y diciembre se realizó la convocatoria a las músicas: la grabación principal, en Bo Estudio, tuvo lugar el 19 de diciembre, en enero tuvieron lugar tres sesiones de grabación adicionales y el 3 de febrero la del videoclip en el Museo Blanes.
Las que vinieron primero / A través de las espinas / Fueron abriendo senderos / Hoy ya no somos las mismas
La idea de la canción surgió “de la necesidad del equipo de Bizarro de mostrar la enorme cantidad de talento de las mujeres músicas uruguayas”, dijo Rossi a Búsqueda, y agregó que la idea surgió en charlas exploratorias como “un We Are the World femenino” (en referencia a la legendaria canción benéfica grabada por una constelación de estrellas estadounidenses en 1985). “De inmediato, con Ximena, pensamos en Estela (Magnone), que siempre está abriendo caminos en el arte y es una poeta maravillosa. Con Lucía (Severino) trabajaron de una forma hermosa. Convocamos a muchas artistas y después se armó esta lista de más de 40 cantantes, instrumentistas, diseñadoras, realizadoras y otras profesionales. Creo que logramos una canción atravesada por todas las generaciones, todos los estilos y todos los niveles de popularidad”. Rossi se muestra “muy agradecida” con las participantes por su “amor, tiempo, talento, energía y corazón para que esto saliera así de hermoso”.
Para Magnone, quien, además, es una de las cantantes y toca el teclado en la grabación, se trata de “una canción de celebración de las conquistas de las mujeres a lo largo del tiempo y de esperanza en continuar en ese camino de logros, fortaleza y libertad”.
En el plano musical,Mujeres de todas partes, a cuya escucha accedió Búsqueda, propone una muy bien lograda amalgama entre tradición y vanguardia. La composición y sus arreglos instrumentales atraviesan distintos géneros, en los que predomina una matriz latinoamericana. Sobre una base electrónica creada por Severino, que incluye una especie de zampoña digital, conviven un entramado guitarrero de milonga oriental con una línea percusiva de tambores, cercana al candombe, y un patrón rítmico definido por el bajo que está emparentado con estilos tropicales. Es posible apreciar a lo largo de toda la canción varios samples y sobregrabaciones de factura digital. Para entender la dimensión colectiva de la producción, es clave el dato de que la mezcla contiene 187 pistas.
Severino describió cómo concibió el sonido de la canción: “La idea fue crear una música que pudiera albergar la diversidad de todas las voces, las de las cantantes y las de los instrumentos. Entonces, lo primero que hice fue encerrarme y componer la base electrónica, el beat, y lograr que eso fuera potente, contundente”. La compositora quiso que esa base fuera “bien fuerte, para jugar sobre ella con las voces y los instrumentos, con una identidad bien marcada, que le permita a la canción mostrar el origen de todas nosotras. Que la canción reflejara que somos músicas de América del Sur, que tenemos distintas raíces y que cultivamos distintas rítmicas que obviamente se mezclan”.
Somos mujeres de todas partes / Somos hermanas hijas y madres / Juntas hacemos esta canción / Que ya resuena en cada rincón
Esa concepción sonora es para Severino un “híbrido” que “permite escuchar distintas vertientes de un modo natural. La productora también buscó dotar a la canción de “la energía y la alegría necesarias para albergar el mensaje tan sentido como el que tiene”. Agregó que se trabajó mucho en “las estrofas, los estribillos y la estructura de la línea de tiempo” con la intención de “que la música acompañara la fortaleza que traen esas palabras, que el sonido fuera su sostén y su soporte”.
Severino estuvo a ambos lados del vidrio, pues además de producir, interpreta piano, acordeón, teclados y programaciones. El plantel de instrumentistas, también completamente femenino, reúne talentos experimentados y emergentes: Mariana Vázquez, Julia Melo y Jacinta Bervejillo (guitarras), Shyra Panzardo (bajo) y Ana Claudia Chacha de León (percusión).
La voz protagónica alterna con la de 31 cantantes, todas uruguayas menos la argentina Sandra Mihanovich. La lista refleja un abanico muy amplio de caminos recorridos y popularidad. Corresponde mencionar la lista completa. Las más experientes y conocidas son Magnone, Cristina Fernández, Malena Muyala, Mónica Navarro, Samantha Navarro, Marihel Barboza y Mihanovich.
Otro segmento está formado por artistas surgidas hace ya un buen tiempo y consolidadas, como Alfonsina, Florencia Núñez, Majo y la del 13, Sole Ramírez, Papina de Palma, Chabela Ramírez y Severino.
El tercero, el más numeroso, reúne a las que están en rodaje, cuya notoriedad es más reciente: Anita Valiente, Bárbara Jorcín, Rodra, Kira 1312, Agustina Giovio, Ihara Burgos y Paula Go. Están las jóvenes emergentes Aldana Cardozo, Florencia Bonavida, Guadalupe Calzada, Paola Fontana y Josefina Tomás, y las que se mueven en ámbitos más alternativos como Lali Gaspari, Lys Gainza y Ana Oliver. También participan Rossi y la niña Eukene Izaguirre, hija de Severino.
La realización involucró otros rubros, que también, fiel a la premisa fundamental, fueron desempeñados por mujeres: el diseño gráfico fue de Margarita Brum, la realización audiovisual y la fotografía de Isadora Villa y Agustina Mazzuchi, el maquillaje de Camila Priore y la interpretación en lengua de señas de Daily Rojas.
Sin embargo, si bien la arista más visible del proyecto es su “mano de obra” mayoritariamente femenina, existe un aspecto de la producción acaparado casi totalmente por varones: el técnico. La grabación en Bo Estudio estuvo a cargo de Federico Ucha y el cantautor Diego Matturro (en su calidad de técnico), la mezcla también fue de Ucha (junto con Severino) y el master, del argentino Martín Pomares. En la asistencia de producción de video estuvo Milton Rossi.
Enarbolando banderas / No volveremos atrás / Y estaremos siempre alerta / Cuidando nuestro lugar
No se trata de un capricho ni una casualidad. Basta observar con atención las fichas técnicas de las grabaciones musicales en Uruguay para comprobar que la mayoría abrumadora de ingenieros, diseñadores, técnicos e incluso operadores de sonido, tanto en los estudios como en proyectos de factura casera, son varones. Hay abundante evidencia de que en la producción sonora la brecha de género vive y lucha.
“Estoy absolutamente de acuerdo”, dice Rossi, y señala que la falta de mujeres en puestos técnicos es una carencia general no solo de la música, sino también del teatro, el audiovisual, la televisión y la radio. “En las guitarras no dudamos que el trío de Mariana Vázquez, Las Cobelli, era perfecto. Son unas maestras. En el bajo no dudamos en llamar a Shyra, en la percu, a la Chacha. Pero como el tiempo era poco, sabíamos que ponernos a buscar mujeres técnicas iba a ser un dolor de cabeza. Las hay, pero son muchas menos. Por eso preferimos usar nuestros recursos habituales en Bizarro, el estudio con el que tenemos un convenio y el masterizador argentino Martín Pomares.
Una curiosidad de la producción es que el videoclip fue rodado en el Museo Blanes. La elección responde a las circunstancias históricas que habitan el decimonónico edificio enclavado en el Prado. La realización, dirigida por Isadora Villa y Agustina Mazzuchi, fue concebida como una referencia “a la opresión y lucha que han tenido que enfrentar las mujeres a lo largo de la historia”. Por esa razón se eligió el Museo Blanes, edificio que en su origen fue la casaquinta en la que vivió Clara García de Zúñiga, mujer montevideana que en 1885 fue acusada de falta de moral y de conductas libertinas; un tribunal médico y jurídico determinó que padecía desequilibrios mentales, por lo que fue despojada de sus bienes y recluida por su familia en el altillo de la casa, donde murió, lo que incluso dio lugar a la leyenda urbana sobre su fantasma, que, por supuesto, habita el museo.
Somos más libres ahora / Y más fuertes cada día / Renovando la esperanza / Con cada nueva conquista