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Para la Institución Nacional de Derechos Humanos hubo “censura previa” del Teatro Solís en muestra de Rama
El informe de la institución señala “falta de transparencia” y “vulneración al derecho a la libre expresión”; la denuncia penal por “abuso de funciones” contra Malena Muyala fue archivada por Fiscalía
En setiembre de 2023, Claudio Rama, economista y doctor en Derecho y Educación, denunció por varias vías lo ocurrido en torno a su muestra Vidas encajonadas, que en principio se iba a exhibir en la sala Estela Medina del Teatro Solís entre noviembre y febrero de 2024. Una de las denuncias fue penal y apuntó a la directora del teatro, Malena Muyala, quien le había solicitado que actualizara los textos que acompañaban la muestra según la perspectiva inclusiva del teatro y de la Intendencia de Montevideo (IM).
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Esta solicitud le llegó al artista por mail el 25 de julio de 2023, después de varios intentos para que Muyala confirmara la realización de la muestra, que se había acordado en abril con el encargado de la sala, Marcelo Sienra. Rama pidió explicaciones sobre el alcance del pedido y solicitó varias veces, sin éxito, reunirse con Muyala. Finalmente, hizo pública la situación en Búsqueda y presentó la denuncia penal por “hechos con apariencia delictiva que encuadran con el delito de abuso innominado de funciones (art. 162 del Código Penal)”. Esta denuncia fue archivada en mayo por el fiscal Pablo Alejandro Rivas.
Vidas encajonadas, que al final se expuso este año de marzo a mayo en el Espacio Idea del MEC, se compone de una treintena de “escenas” integradas por pequeñas esculturas hechas con material reciclado e instaladas en cajas. Los textos que las acompañan explican los conceptos que el artista allí representa y que considera parte integral de la muestra.
Rama también presentó una denuncia ante la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) por considerar que el pedido de Muyala de modificar sus textos “constituye un acto de censura y una flagrante violación de la Constitución de la República, ya que menoscaba el derecho fundamental a la libertad y a la libre expresión”.
La INDDHH aceptó estudiar el caso y le envió el 25 de junio al intendente interino de Montevideo, Mauricio Zunino, un detallado informe en el que repasa cronológicamente los hechos, los mails enviados por el artista y el curador de la muestra, Eduardo Pincho Casanova, y no respondidos por Muyala, así como la información brindada por la IM. “Lo que se solicitaba entonces era que una parte de la obra integral integrada por esculturas, textos conceptuales e isotopos fuera cambiada, no aclarándose las consecuencias de una eventual omisión o en otras palabras qué pasaría si el artista no quisiera modificar los textos”, explica el informe, y agrega que esa situación “se enmarca en el concepto de censura previa”.
La institución señala que para su informe no tuvo elementos para conocer “qué contenido debía ajustarse al lenguaje inclusivo y referido a qué colectivo de personas”. Considera, además, que el argumento de Muyala para no responder los pedidos de reunión de Rama entre julio y setiembre por cuestiones de agenda o por un viaje al exterior “es una explicación no plausible ni aceptable”, porque durante esos meses el artista y su curador siempre estuvieron a disposición.
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Malena Muyala, directora del Teatro Solís
Javier Calvelo/adhocFOTOS
En octubre de 2023, la INDDHH solicitó a la IM un pedido de informe sobre esta situación. Una de las explicaciones recibidas fue que la solicitud de Muyala al artista apuntó a una “perspectiva inclusiva” hacia todo tipo de público, tal como lo indican la legislación nacional y la internacional. Pero, para la INDDHH, “hay una diferencia grande entre contratar o poner a disposición de los concurrentes un intérprete de LSU (lengua de señas), utilizar códigos QR o pasar los textos a lenguaje Braille y modificar el texto original”. Agrega además que la respuesta de la IM “omite cualquier consideración y mención a toda legislación nacional e internacional tuitiva de un derecho humano fundamental en las democracias y que es el derecho a la libertad de expresión, de la cual nuestro país tiene una larga tradición”.
Por otro lado, el informe tiene un pronunciamiento sobre la conducta de Muyala. “A la INDDHH no le corresponde expresarse sobre si existió una conducta pasible de reproche penal. Sin embargo, anota que la conducta de la directora no ha sido transparente”. En otro momento agrega: “La falta de certeza en cuanto a cuál y cómo debería modificarse el texto —que solamente quedó en una mención en un correo electrónico del mes de julio—, sumado a la reunión pedida en más de una ocasión y nunca concretada, remite también a una conducta de la administración que debería revisarse y es la falta de transparencia en el actuar”.
En su resolución, la Comisión Directiva de la INDDHH establece que hubo “una vulneración al derecho a la libre expresión” hacia Rama por la dirección del Teatro Solís y recomienda a la IM que “disponga una investigación interna para dilucidar eventuales responsabilidades administrativas”.
La INDDHH fue creada por ley en diciembre de 2008 como un órgano estatal autónomo que funciona en el ámbito del Poder Legislativo. El 22 de junio de 2012 asumió el primer Consejo Directivo nombrado por la Asamblea General. Su actual presidenta, Jimena Fernández, explicó a Búsqueda que las resoluciones que emite la institución no son vinculantes. “Lo que se busca es desde una visión colaborativa y preventiva señalar cuando un derecho se ve vulnerado. Se busca que el organismo en cuestión tome medidas para reparar esa vulneración o para evitar que vuelva a suceder en el futuro”.
Una vez que el organismo recibe el informe, tiene cinco días para responder, tanto para aceptar la recomendación como para expresar sus reparos. Si no responde pasado ese plazo, se toma como desinterés en corregir la práctica que vulneró un derecho. En ese caso, se difunde el contenido y se publica en la página web de la INDHH. “Al no ser una resolución vinculante la institución no va más allá de eso”, aclaró Fernández.
Búsqueda consultó a la IM sobre este informe y recibió por escrito la siguiente respuesta: “La Intendencia de Montevideo respondió en tiempo y forma en dos oportunidades a la solicitud de información del Consejo Directivo de la Institución de Derechos Humanos. La primera respuesta se remitió el pasado 5 de diciembre de 2023 y la segunda este martes 2 de julio. Se presentó toda la información que fue solicitada. En cuanto a la investigación administrativa que se sugiere, la IM respondió que dicha investigación ya fue efectuada por parte de la IM y que dichas conclusiones fueron informadas a la Junta Departamental, al denunciante y a la INDDHH el pasado 5 de diciembre”.
Entre tanto, a partir de la resolución de la INDDHH, Claudio Rama le envió hoy, miércoles 3, una carta a María Inés Obaldía, directora de Cultura de la IM, para solicitarle una reunión, volver a "fojas cero" la situación y poder "exhibir libremente" sus piezas en alguna sala municipal.
